Hoy me encontré con una Columna escrita por Juan Carlos Hidalgo en
America Economía donde hace una interesante reflección de lo que Steve Jobs
significo para el mundo, sinceramente creo que el aporte que hizo Jobs a la
humanidad se hubiera logrado, con o sin el, pero a dos días de su muerte sigo
viendo con asombro las muestras de agradecimiento hacia Jobs de buena parte de
las personalidades mundiales.
Esto visto desde la perspectiva, no de un "líder"
mundial sino de un ciudadano de a pie, tiene solo una lectura, y es la de que
el mundo realmente si se encuentra de cabeza.
Y aquí me sirvo de las propias palabras de Jobs para fundamentar
mis dichos. Este es parte de su famoso discurso en la Universidad de
Standford en el 2005:
“Tu tiempo es
limitado, de modo que no lo malgastes viviendo la vida de otra persona. No
quedes atrapado en el dogma, que es vivir como otros piensan que deberías
vivir. No dejes que los ruidos de las opiniones de los demás acallen tu propia
voz interior. Y lo que es más importante, ten el coraje para hacer lo que te
dice tu corazón y tu intuición. De alguna manera ellos ya saben la clase de
persona que quieres llegar a ser. Todo lo demás es secundario”.
Lo que en palabras mas, palabras menos Jobs esta sugiriendo a los jóvenes graduados es a ser independientes, a que se aparten de la idea de sociedad, y vayan solos a conseguir lo que cada uno desea, que no se detengan a ver si a los demás les agradan sus ideas o les sugieren que hacer.
Es como bien dice Juan Carlos Hidalgo, el Ideal capitalista, escrito hace mas de un siglo por Adam Smith, es el imponer ideas egoístas en búsqueda del bien estar personal.
Esto esta bien, si lo que importa es el negocio, este es el pensamiento de Smith:
"el hombre
necesita casi constantemente la ayuda de sus semejantes, y es inútil pensar que
lo atenderían solamente por benevolencia (...) No es la benevolencia del
carnicero o del panadero la que los lleva a procurarnos nuestra comida, sino el
cuidado que prestan a sus intereses".
Son los intereses individuales lo que hace de este mundo un lugar donde el pensamiento de bien común solo es posible partiendo de la idea de que primero estoy yo, y después el mundo...Egoísmo en su máxima expresión. El sacrificio en pos de los demás queda en los romanceros del siglo XIX, es palabra muerta.
Yo me quedo con la idea de tratar de alejarnos un poco del bien personal como fin en la vida y pensar que al vivir en este planeta, somos irremediablemente solo una célula, parte de un organismo mayor en el cual todos nos debemos a todos.