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lunes, 9 de mayo de 2011

La Marcha y los alacranes.

Resulta difícil creer que la marcha nacional tenga o vaya a tener alguna resultado satisfactorio en el corto o mediano plazo, mas aun cuando en otras ocasiones este tipo de demostraciones ya se han registrado en el país por muy diversas causas y hasta la fecha no se puede considerar que alguna haya tenido como resultado el logro que se hayan propuesto sus organizadores.
Puede haber muchas buenas intenciones, y no lo pondré en duda, pero también es innegable que un gran numero de los asistentes a la marcha, fueron ciudadanos que, no teniendo algo mejor que hacer en domingo, salieron a la calle a "pasear" como pasa con aquella familia que sin necesidad de comprar, va al super en domingo solo a distraerse, a pasar el rato.
México padece los males causados por muchos Mexicanos y no es de hoy o de ayer o desde el comienzo de Calderón en el gobierno, ni siquiera desde que Salinas era presidente, es un mal que tiene a muchas generaciones de Mexicanos como participantes.
Nosotros los Mexicanos que con nuestras actitudes en la vida diaria, al pasarnos un alto, al dar mordidas y recibirlas, al ser como los Alacranes en cubeta, que no permiten que uno salga y lo jalan al fondo queriendo salir todos, somos los únicos responsables de lo que ocurre hoy en nuestro país y no es con una, ni con mil o un millón de marchas como esto podrá realmente cambiar.
O como le explicas a la mama de un niño de 4 años, que es encañonado por otro niño de 16 con una escuadra 9 mm. solo por presionar a la madre a que le entregue las llaves de la camioneta que intenta robarle, que la marcha sacara a ese niño ladrón y posiblemente asesino de la calle y le quitar el arma de sus manos.
No, no nos engañemos, no es la marcha la solución, como tampoco lo es "papa gobierno", la solución somos nosotros mejorando, cambiando, enseñando con el ejemplo a nuestros hijos. Somos los responsables de nuestra casa, como lo somos de nuestro país, y no es con marchas como esto cambiara.
Pongamos manos a la obra, no es tarde, todavía podemos sacar a nuestros hijos y a los hijos de ellos de este hoyo que hemos cavado los Mexicanos, Todos.

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